Información sobre las obras de arte
Perdonar no es una forma fácil de mirar a los demás, pero sí un gran acto de amor propio.
Esta obra representa el tránsito interior que convierte el dolor en comprensión y la herida en sabiduría. Gloria Jaramillo concibe el perdón como un proceso de expansión consciente, donde la energía del amor libera, transforma y sana.
El color se convierte en lenguaje espiritual: veladuras de luz, tonos cálidos y vibraciones sutiles guían al espectador hacia un espacio de silencio interior y reconciliación.
Perdonar no significa olvidar ni negar; es recordar con compasión, observar sin juicio, integrar con consciencia y finalmente amar lo vivido.
SENTIR, OBSERVAR, INTEGRAR, APRENDER, TRANSFORMAR, AGRADECER, AMAR Y PERDONAR.