Información sobre las obras de arte
Esta pintura sobre lámina metálica, limpia en algunas partes, lo que refleja la imagen, y en otras oxidada, presenta, en técnica mixta, una narrativa surrealista a través de su superficie de gran textura. La composición es una historia de dos mundos, marcadamente divididos pero intrincadamente conectados mediante un uso magistral del color y la forma. En el plano superior, un cielo tormentoso grabado sobre el metal da paso a un brillante azul celestial, del que emerge un sereno rostro querubín, acunado entre nubes etéreas y dos delicadas rosas azules. Esta visión onírica de inocencia y naturaleza contrasta bruscamente con la base terrenal y áspera de abajo. Una franja de rojo intenso sostiene un paisaje urbano distante, que actúa como umbral hacia una vasta extensión de óxido profundo que evoca una sensación de tiempo y decadencia. Sobre este paisaje corroído, misteriosas figuras plateadas —una máscara estilizada, rastros de puntos y un símbolo de la paz— cuentan una historia de historia antigua o recuerdos olvidados. Esta obra de arte única es una poderosa pieza de arte mural contemporáneo, que combina magistralmente temas de inocencia y decadencia, lo urbano y lo espiritual. Las ricas texturas táctiles y la imaginería simbólica la convierten en un centro de atención para cualquier decoración moderna, invitando a una interpretación y conversación infinitas sobre la compleja naturaleza de nuestro mundo.
